JORDI TORRES CALVO
«Pues eso es lo que haré. Caminaré tranquilamente, sin prisa y sin un destino claro, por estos valles del gigante dormido que ahora tengo tan cerca. El placer del viaje radica solo en el viaje mismo, en el comenzar el camino. (...) No puedo dejar de avanzar, soy como un río que fluye hacia el mar sin posibilidad de volver atrás. Avanzo y procuro no dejar huella por donde paso, pero busco que los lugares por los que transito como un peón caminero sí me dejen una marca en mi interior. Qué placer pasar por la vida desapercibidamente. (...)